Experto eneficiencia energética

Un Certificado de Ahorro Energético (CAE) es un documento digital que certifica que, después de llevar a cabo una medida de eficiencia energética, se ha logrado un nuevo ahorro de energía final equivalente a 1 kWh. De esta manera, si se implementa una acción que resulta en un nuevo ahorro anual de 500 kWh, se pueden generar 500 CAE.

Este instrumento posibilita la monetización de los ahorros energéticos, permitiendo la recuperación parcial de los costos de las inversiones en eficiencia energética (como el cambio de iluminación, la mejora del aislamiento térmico, la renovación de equipos industriales o domésticos, entre otros). Esto se debe a que el usuario final puede recibir una compensación al vender los ahorros obtenidos, los cuales luego se certifican a través del Sistema de CAE.

El Sistema de CAE surge debido a la necesidad de generar nuevos ahorros de energía mediante la ejecución de proyectos de eficiencia energética. De esta manera, España busca cumplir con las obligaciones contraídas con la Unión Europea a través de la Directiva de Eficiencia Energética. Además, nace con la intención de facilitar la inversión en tecnologías de eficiencia energética, fomentando así un mercado en este sector.

Con la aprobación de este sistema, se establece un mercado en el que los sujetos obligados pueden adquirir ahorros de aquellos que lleven a cabo proyectos para obtener estos ahorros y certificarlos posteriormente. Alternativamente, los obligados también pueden comprar directamente CAE a otros sujetos obligados o a sujetos delegados. En última instancia, los sujetos obligados cumplen con su obligación legal de ahorro energético, pero ahora también tienen la opción voluntaria de liquidar los CAE que generen o adquieran en el mercado para cumplir con dicha obligación, en lugar de realizar una contribución económica al Fondo Nacional de Eficiencia Energética.

Este sistema se establece mediante un real decreto, de acuerdo con lo establecido en la Ley 18/2014, de 15 de octubre, que aprueba medidas urgentes para el crecimiento, la competitividad y la eficiencia. Además, se desarrolla mediante diversas órdenes disponibles en el apartado normativo.

Sujetos Obligados: se refieren a las empresas energéticas (comercializadoras de gas y electricidad, así como operadores al por mayor de productos petrolíferos y GLP) que tienen la obligación de alcanzar una cantidad específica de ahorro energético cada año. Estas empresas pueden cumplir con su obligación mediante el pago al Fondo Nacional de Eficiencia Energética (gestionado por el IDAE y cuyos fondos se destinan a líneas de ayuda para estos tipos de proyectos) o liquidando CAE (ya sea generadas por ellas mismas o adquiridas en el mercado).

Sujetos Delegados: son empresas que pueden asistir a los obligados en la obtención de CAE, comprometiéndose a liquidar una cantidad determinada de CAE en su nombre cada año.

Propietario del ahorro: originalmente, es la persona que ha realizado la inversión en una medida de eficiencia energética que puede generar ahorros convertibles en CAE. La propiedad de los ahorros puede ser transferida a un tercero a cambio de una contraprestación.

Usuario final: es la persona que experimenta un impacto positivo de la medida de eficiencia y generalmente coincide con el propietario original de los ahorros.

Verificador de ahorro energético: es la entidad acreditada por ENAC que verifica que la medida se ha llevado a cabo, que la documentación es correcta y que se han logrado los ahorros de energía declarados.

También forman parte del Sistema de CAE, representando a la Administración, los Gestores Autonómicos y el Coordinador Nacional del Sistema de CAE.

Además, puede haber intermediarios que trabajen para el resto de los agentes, como por ejemplo, empresas instaladoras o de ingeniería.

La cantidad de CAE se evalúa en kWh y corresponde a la energía final ahorrada durante la vida útil de las nuevas instalaciones o equipos. Todos los proyectos que logren un ahorro en el consumo de energía final pueden monetizar estas economías mediante un CAE. Esto se puede hacer solo a través de dos modalidades:

Proyecto estandarizado

Considera las soluciones energéticas que suelen repetirse con mayor frecuencia. En este caso, tendrán una Ficha CAE que conlleva varias ventajas:

• Facilita el proceso de manera más rápida y sencilla.
• Incluye una fórmula de cálculo que determina el ahorro energético que se puede certificar, sin necesidad de realizar mediciones una vez finalizada la instalación.
• Establece claramente los requisitos que debe cumplir para poder utilizar esta ficha.
• Existe un catálogo de fichas CAE (actualmente más de 50 fichas), que se actualizarán y ampliarán periódicamente.

Energywan puede encargarse de todas las etapas de su proyecto, incluida la planificación de las obras y/o la elaboración del expediente administrativo, para permitirle valorizar sus operaciones de eficiencia energética mediante el uso de los CAE.